Sant Joan de Vilatorrada se extiende a caballo del plan de Bages y las elevaciones que cierran esta fértil llanura hacia ponente, donde el cerro de Collbaix es la expresión más emblemática.
Desde esta cumbre se pueden contemplar los elementos del paisaje de la cultura del vino, como por ejemplo la viña o las barracas de piedra seca y reseguir el río Cardener, elemento esencial de una población muy vinculada a la revolución industrial y las fábricas textiles tal y como se hace patente cada año a la célebre Fira Embarrats.