La Resclosa dels Manresans es el punto de partida del canal medieval de la Séquia, donde se recogen las aguas del río Llobregat.
Originariamente estaba hecha con troncos de madera, pero desde principios del siglo XX está recubierta con hormigón. Sin embargo, la esclusa conserva la forma semielíptica que tenía cuando se construyó. En una caseta adyacente se regula la entrada de agua en el canal, que en este primer tramo es subterráneo.
La esclusa se encuentra en un espacio natural tranquilo perfecto para dar un paseo. En otoño es especialmente bonito, ya que los arces cogen tonalidades rojizas.